En las infraestructuras e instalaciones especiales TI de las empresas, el uso de servidores redundantes es una práctica habitual hoy en día, pues permiten mejorar la disponibilidad de los servicios con un sistema ágil, flexible, escalable y de gran fiabilidad.
Se tratan de servidores que no están en línea, pero que se pueden utilizar de forma inmediata si falla o hay un incidente con el servidor principal, garantizando el acceso a los servicios y la información de la empresa en todo momento.
Qué son servidores redundantes
Los servidores redundantes son una infraestructura informática que permite proporcionar nuevos servidores adicionales de forma rápida y sencilla (en tiempo de ejecución), es decir, no se necesita detener el sistema para añadirle un nuevo servidor. Esta redundancia de servidores se emplea principalmente para tareas de respaldo, failover o incremento de rendimiento y potencia.
Cuando hablamos de servidores redundantes, lo estamos haciendo de disponibilidad de los servicios TI, pues su uso tiene como principal objetivo garantizar el acceso a los mismos en caso de problemas o incidencias. En un sistema de servidores redundantes, se pueden crear réplicas del servidor con sus mismas características (potencia, almacenamiento, aplicaciones y otros parámetros operativos) y ponerlos en funcionamiento en tiempo real.
Cómo funciona un sistema de servidores redundantes
Este tipo de sistemas utilizan diferentes servidores, donde uno actúa como principal, mientras el resto permanecen offline. El sistema se configura de tal forma que si el servidor principal sufre de algún problema o deja de funcionar, automáticamente es sustituido por uno de los servidores que no estaban activos (en modo espera), pasando a realizar las funciones del principal en un periodo mínimo de tiempo.
Otra forma de emplear servidores redundantes es que todos estén activos repartiéndose las cargas de trabajo. Si alguno de los servidores falla, el resto asume de forma automática sus tareas para garantizar la disponibilidad de datos y servicios. Con estos sistemas, se garantiza la disponibilidad del servidor incluso en las peores situaciones (un fallo de hardware, por ejemplo).
Por qué utilizar servidores redundantes en tu empresa
Cada vez son más las empresas que apuestan por el uso de servidores redundantes para gestionar su información y alojar sus herramientas y aplicaciones. Veamos cuáles son los principales beneficios que ofrecen estos sistemas redundantes.
Alta disponibilidad
La alta disponibilidad consiste en mantener los servicios y el acceso a la información siempre disponibles, es decir, en un 99,99 % del tiempo. La redundancia de servidores, así cómo otras tecnologías (como el balanceo de cargas), ha permitido maximizar la disponibilidad de los servicios gracias a un sistema que evita caídas y garantiza siempre un alto rendimiento.
En un sistema redundante, al producirse una incidencia o falla que afecte al servidor principal, o a uno de los servidores del sistema, otro servidor asume sus tareas y procesos de forma inmediata y automática, evitando que el usuario final se vea afectado por este problema.
Protección de la información
El acceso a la información está garantizado con servidores redundantes, algo fundamental para cualquier empresa en esta era digital donde los datos son el principal activo del negocio.
Apostar por sistemas redundantes permite a la empresa proteger sus datos y acceder a ellos o recuperarlos ante cualquier tipo de problema o incidente (ciberataque, infección por malware, robo de información, problemas de suministro eléctrico, e incluso ante desastres naturales).
Escalabilidad y flexibilidad
Un sistema de servidores redundante se adapta a las necesidades de la empresa en cada momento. Esta flexibilidad y escalabilidad permite ampliar la capacidad de los servidores o su número en cualquier momento, sin que ello suponga una interrupción del servicio o del acceso a los datos, o necesite de la realización de procedimientos y procesos complejos.
Sistemas más confiables
Las empresas necesitan sistemas confiables que garanticen el acceso en todo momento a sus sistemas, aplicaciones y datos. En un entorno altamente competitivo y digital, donde el uso de tecnologías como el cloud computing o el big data son imprescindibles para ser más competitivos, los servidores redundantes son sistemas de gran importancia a la hora de dar tranquilidad y confianza a las empresas.
Con este tipo de sistemas redundantes, las empresas pueden estar confiadas sobre el acceso 24×7 a sus plataformas e información.
Elimina los problemas con el hardware
Los servidores están formados por elementos electrónicos que fallan debido a su empleo intensivo a lo largo del tiempo. Este tipo de problemas de hardware son los causantes de muchos de los parones o interrupciones de la actividad, porque necesitan de una intervención técnica para una reparación o sustitución de piezas (con la consiguiente interrupción del servicio).
Con los servidores redundantes, ante cualquier fallo de hardware, otro servidor asumirá los procesos, evitando interrumpir el servicio mientras se realizan las correspondientes tareas de reparación. Por ejemplo, si alguno de los módulos de memoria RAM del servidor falla, otro servidor asumirá sus tareas de forma inmediata, lo que permite realizar la sustitución de ese módulo en cualquier momento sin que ello afecte a la actividad del sistema.
