Uno de los síntomas que presenta el COVID-19 es el aumento de la temperatura corporal humana, es decir, la fiebre. Por eso una de las medidas que se están utilizando para controlar la pandemia y detectar a posibles contagiados es la medición de la temperatura corporal. La tecnología permite disponer de dispositivos como las cámaras para el control de la temperatura corporal, que facilitan la medición de la temperatura a grupos de personas y que están siendo utilizados por múltiples organizaciones, entidades sanitarias y empresas.
A continuación, veremos qué esa una cámara termográfica, cómo funciona, qué tipos existen y para qué negocios es recomendado su uso.
¿Qué son las cámaras termográficas?
Las cámaras termográficas son dispositivos cuyo objetivo es el de medir la temperatura sin necesidad de que se produzca contacto. Suelen ser utilizadas en el sector industrial para detectar variaciones de temperatura y poder controlar y modificar la misma.
En el sector sanitario se utilizan para medir la temperatura humana sin necesidad de tener que tocar al paciente. Estas cámaras son capaces de analizar con un alto grado de precisión, la temperatura corporal de las personas, facilitando la detección inmediata de cuadros febriles.
¿Cómo funcionan las cámaras termográficas?
El uso de los distingos tipos de cámaras termográficas en el sector sanitario para el diagnóstico se remonta a hace más de 40 años, y con el paso de tiempo se han ido sofisticando con el uso de algoritmos avanzados e inteligencia artificial.
Las cámaras termográficas que se utilizan para medir la temperatura corporal de las personas funcionan de la siguiente manera.
- Captan la emisión térmica de los objetos en el rango de espectro de infrarrojo para detectar fuentes de calor y medir su temperatura.
- Hacen uso de algoritmos avanzados para poder medir la temperatura con un alto grado de precisión, llegando a disponer de una precisión de +/- 0,3ºC con el uso de un dispositivo calibrador llamado “cuerpo negro” que se mantiene a una temperatura constante por lo que tiene una emisividad térmica fija y conocida
- Incorporan inteligencia artificial para detección facial, lo que permite identificar cada individuo para medir su temperatura, y reconocer objetos que puedan ser fuentes de calor externas, como cigarrillos o bebidas.
- Permiten guardar imágenes de las personas analizadas.
- Cuentan con un sistema de alarma que avisan de aquellos casos donde la persona presente fiebre.
Las cámaras termográficas son capaces de medir la energía que irradian los cuerpos, y a partir de ellas calcular su temperatura. Asignan a cada temperatura una franja de color (según una paleta preseleccionada) donde el color rojo suele representar la temperatura a partir de la cual empieza a considerarse fiebre. Así, de forma inmediata se puede detectar la temperatura que presenta cualquier persona que se ponga delante de la cámara y a unos pocos metros de ella.
¿Cuáles son los tipos de cámaras termográficas?
Es posible encontrar distintos usos y tipos de cámaras termográficas que se adaptan a distintas situaciones o necesidades concretas. Podemos dividir estos dispositivos en:
Cámara termográfica
Se trata de una cámara o conjunto de cámaras que pueden detectar la temperatura corporal de distintas personas gracias al uso de inteligencia artificial. Disponen de alarma visual y sonora para avisar de aquellas personas que presenten un estado febril, y pueden disponer de una gran precisión, llegando a tener un error de apenas +/- 0.3 ºC).
El control de este tipo de dispositivos puede hacerse mediante un monitor o accediendo a través de una plataforma digital desde un ordenador o dispositivo móvil. Teniendo en cuenta la densidad del tráfico de personas que monitorean estas cámaras se pueden dividir en:
- Gran densidad de tráfico. Se trata de soluciones ideadas para lugares donde se produce una gran afluencia de personas y que permiten analizarlas de cuatro en cuatro, generando alarmas en caso de estado febril, todo mediante un proceso automatizado.
- Densidad media de tránsito. En este grupo suelen incluirse las soluciones portátiles de medición de temperaturas, que requieren la operación manual para su uso (aunque pueden contar también con detección automática de fiebre).
- Baja densidad de tránsito. Este tipo de dispositivos son ideales para aquellos establecimientos, zonas o casos, donde el tránsito de personas sea bajo. Se trata de dispositivos más económicos y pueden ser tanto portátiles como fijos, e incluir detección automatizada de fiebre.
Tótem de medición de temperaturas
Estos dispositivos pueden instalarse de forma sencilla en cualquier lugar de un local o establecimiento y permiten que las personas midan su temperatura acercándose a dos metros del mismo. Incluye reconocimiento facial y cuenta con alta precisión, con un error de +/- 0,5 ºC.
El tótem de medición de temperaturas no necesita ninguna acción de instalación o configuración necesaria para su uso. Solo es necesario enchufar y estará listo para su uso (plug and play).
Para qué negocios es recomendable el uso de cámaras termográficas
El uso de cámaras termográficas COVID-19 se está haciendo fundamental en espacios públicos concurridos y en sectores como alimentación, salud o seguridad. Sin embargo, son recomendables en cualquier tipo de empresas, pues de forma sencilla y automatizada pueden detectar casos de personas con fiebre y poder actuar en consecuencia (informándole para que acuda a un centro de salud a realizarse un test de COVID-19 e impidiendo que entre en contacto con otras personas, para eliminar el riesgo de contagio).
Este tipo de soluciones tendrán duración en el tiempo, y serán necesarias en un futuro para poder controlar otros posibles casos de virus similares al COVID-19 que puedan aparecer en los próximos años. Por eso se trata de una inversión en seguridad (tanto para empresa, empleados y clientes) que servirá tanto en el estado actual, así como medida de prevención para el futuro.
Es necesario utilizar toda la capacidad tecnológica para luchar contra este nuevo y desconocido virus, que es contagioso en personas asintomáticas, por lo que se contagia de forma rápida y silenciosa. Poder detectar quién tiene fiebre sin necesidad de contacto es una gran ventaja, y es posible hacerlo con la instalación de sistemas con cámaras termográficas. Se trata de dispositivos capaces de detectar cambios térmicos, medir la temperatura con mucha precisión y utilizar inteligencia artificial para detectar personas y su temperatura corporal, alertando en caso de que tengan fiebre.
La mejor solución para instalar un kit de detección de temperaturas es acudir a una empresa de ingeniería especializada, que disponga de experiencia en el sector y pueda implementar el sistema idóneo para cada negocio.
Los kits se han diseñado para un rápido montaje y desmontaje e incluso para que sea posible modificar su ubicación de manera sencilla, si se requiere adaptar o modificar la configuración de rutas de acceso por variaciones de flujo de personas conforme se reactive la actividad tras las medidas actuales de confinamiento. Los tipos de cámaras termográficas son esenciales para ello.