Los huertos solares son instalaciones que suelen estar aisladas en medio de grandes áreas geográficas. Suelen ocupar mucho espacio y presentan un gran problema para la gestión de su seguridad: un amplio perímetro con muchos puntos de posible entrada. Son instalaciones críticas desde el punto de vista de la seguridad, ya que tienen materiales muy caros (paneles fotovoltaicos, inversores, cableado de cobre…) que son un reclamo constante para los ladrones.
Desde que los parques fotovoltaicos empezaron a proliferar en nuestro país y en el resto del mundo, empezaron a multiplicarse bandas organizadas que se especializaron en este tipo de robos en los que conseguían en una sola noche cuantiosos botines de miles de euros.
La seguridad de una planta fotovoltaica requiere de un avanzado sistema de seguridad que solo se puede encargar a una empresa integral que pueda encargarse de la ingeniería y consultoría, la instalación de los equipos de seguridad y la posterior gestión de las posibles alarmas.
Sistemas de seguridad para huertos solares
Los sistemas de vigilancia perimetral en parques fotovoltaicos son un elemento indispensable para garantizar la seguridad de la instalación. Proporcionan una detección temprana del intento de intrusión y activan una alarma antes de que se produzca el robo.
Un sistema de seguridad perimetral evita importantes daños al patrimonio porque alerta del acceso no autorizado y porque tiene un gran factor disuasorio. La alarma y la detección temprana provocan la huida de los intrusos y también hace que se lo piensen antes de entrar si saben que la instalación cuenta con un sistema avanzado de detección.
La protección se basa en la instalación de diversos detectores de alarma exteriores. Todo empieza con un proyecto de ingeniería y consultoría de seguridad donde se tienen en cuenta las características del perímetro a proteger y cuáles son las mejores soluciones de seguridad.
CCTV con análisis de video
La vigilancia mediante CCTV conectado a la central receptora de alarmas o a la empresa de seguridad de vigilancia física es un elemento imprescindible para los parques fotovoltaicos. Tiene un gran poder disuasorio y es la mejor forma de vigilancia remota de estas instalaciones. En cualquier momento podemos ver qué es lo que está ocurriendo.
A la videovigilancia convencional se ha sumado el análisis de vídeo, que utiliza software de reconocimiento para detectar mejor las intrusiones. Además, este sistema tiene una capacidad de aprendizaje y adaptación continua.
Control de accesos
El control de accesos mediante tarjetas de seguridad, pines o control biométrico hace seguras las puertas del parque fotovoltaicos y que solo el personal autorizado puede entrar al mismo.
Redes de comunicación seguras
Las redes de comunicación pueden estar apoyadas en diferentes tecnologías (conexión IP, GPRS, satelital) y son fundamentales para que todo funcione correctamente: los equipos de seguridad puedan transmitir la información a los vigilantes o a la central receptora de alarmas.
Sensores de valla
Los sensores de valla, aunque actualmente se encuentran en desuso, fueron uno de los elementos más importantes de la seguridad perimetral de un huerto solar, dado que se trataban de amplios espacios sólo cerrados mediante vallas metálicas, rígidas o flexibles. Los sensores pueden ser de diferentes tipos:
Sensores de vibración: es un sistema electrónico de detección especial para vallas metálicas flexible. Cada sensor cubre una parte del vallado (de 2 a 2,5 metros) y es capaz de detectar intentos de corte o trepado del mismo. Esta tecnología es inmune a las inclemencias meteorológicas, por lo que es muy útil para climas adversos. También tienen una gran sensibilidad y precisión en la detección de intrusos.
Sensores de torsión: es un sistema de detección para vallados metálicos rígidos. Los detectores se colocan en la base de los postes y detectan cualquier movimiento o deformación de la estructura, haciendo saltar la alarma cuando hay un intento de trepar la valla o de romperla.
Cable microfónico o cable de fibra óptica: son cables que rodean todo el perímetro de la valla y que detectan los intentos de corte, escala o destrucción de la valla.
Central Receptora de Alarmas
Una central receptora de alarmas o CRA es imprescindible para completar el sistema de seguridad perimetral. La central recibirá todas las alarmas que detecten los equipos y se podrán activar los protocolos de seguridad establecidos.
Turkana es una empresa especializada en recepción de alarmas que pertenece a la empresa Microsegur, líder en seguridad de parques fotovoltaicos.
Con esta CRA el cliente puede ver el estado de su instalación en tiempo real, gracias a su aplicación web. Una buena CRA debe ser compatible con cualquier tecnología de seguridad que esté instalado, y debe contar con un sistema de priorización de alarmas, para evitar gastos y molestias innecesarias. Pero también debe ser capaz de detectar todas las incidencias.
Las falsas alarmas son un gran problema en los parques fotovoltaicos. Estas se pueden producir por animales, ramas de árboles, hierbas altas, etc. Muchas veces estas falsas alarmas, en los CRA convencionales provocan que el sistema deje de funcionar correctamente al poco tiempo y que una buena parte de las cámaras estén inoperativas.
Por ello es necesario contar con un buen CRA que haga una gestión inteligente de las alarmas. Las reales son comunicadas a las fuerzas de seguridad, a los vigilantes o al cliente. Las alarmas de tipo técnico generan un ticket de mantenimiento para que se solucione la incidencia y el equipo de vigilancia esté siempre en óptimas condiciones.
La vigilancia de una instalación tan crítica como un parque fotovoltaico debe esta siempre apoyada en tres pilares fundamentales que están íntimamente relacionados:
1) la ingeniería de seguridad fotovoltaica;
2) la correcta instalación de los elementos de seguridad que necesita ese espacio;
3) la conexión a una buena central receptora de alarmas que nos alerte cuando hay un intento de intrusión o cuando es necesaria una labor de mantenimiento.